Columna: Valdivianos y nueva Constitución

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Por Vicky Carrasco Silva

Concejala de Valdivia

Quiero agradecer a los 8 millones de chilenos que en unidad rechazamos la propuesta de Constitución en el reciente plebiscito de salida. El Rechazo triunfó de manera contundente a nivel nacional, con un 62%, y en Valdivia ganó con el 58% de las preferencias del electorado.

El voto obligatorio vigorizó nuestra democracia, dando paso a un nuevo proceso encabezado por los congresistas, quienes ahora deben iniciar un renovado sistema que garantice la participación de la ciudadanía, poniendo en primer lugar las urgencias sociales de todos los chilenos.

En lo que respecta a la comuna de Valdivia, me comprometo a seguir trabajando por nuestros vecinos, y a visibilizar las urgencias que semanalmente recojo en cada actividad a la que soy invitada y que con gusto asisto. Como concejala soy afortunada en conocer la realidad de cada rincón de la comuna que represento, tengo la responsabilidad de transmitir a los congresistas los temas que aquejan a los valdivianos, para que su voz no quede ausente de este importante nuevo camino que comenzamos como país. Me sumo en mi rol de representante comunal a la construcción de una Constitución que esté a la altura, y que principalmente responda a los requerimientos de cambios sociales.

Las urgencias de los valdivianos son muchas: seguridad, mejor salud primaria y secundaria, pensiones acordes, acceso a la educación y a la vivienda, mejor conectividad y fortalecimiento de las instituciones. Sin duda hay muchos otros temas a los que también se les debe dedicar un espacio en la Carta Magna, respetando la libertad, la vida en comunidad, el Estado de derecho y la familia.

Todo lo anterior debe ser guiado por consensos, por la vía del respeto, del diálogo, la sensatez y el sentido común, características que primaron el pasado domingo 4 de septiembre.

No permitiremos que se repita el desastre del proceso constituyente que acaba de concluir, y que significó que se boten recursos del Estado por aproximadamente $68 mil millones. Ese presupuesto público, que le pertenece a todos los chilenos, pudo haberse invertido en otras iniciativas como en la construcción de más recintos de salud, caminos o liceos en nuestra comuna, por mencionar sólo algunos ejemplos.

Seguiré trabajando -Dios mediante- para que triunfe el amor por nuestra Patria, el amor por nuestra región y sobre todo el amor por Valdivia.

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